1201 d. C. - Despedida de Abraxas a sus compañeros Príncipes

Abraxas, Salubri, Príncipe de Thiuta

Tihuta, 1201:

Queridos compañeros de andanzas:

Como sabéis llevo décadas intentando encontrar mi verdadero camino, a pesar de mi búsqueda aún no lo he encontrado. Sé que quiero lo mejor para los que me rodean, siempre ha sido así, pero no tengo muy claro aún cómo usar esta nueva condición para llevar a cabo mi fín.

Creo que lo estáis sufriendo como yo y he llegado a una conclusión: debo meditar sobre mi destino y la forma de afrontar mi nuevo futuro, un mar de posibilidades que se abren ante nosotros y me abruman.

Mi decisión es la conclusión de unas largas charlas con mi creador Gabriel, y voy a seguir su consejo, retirarme en soledad hasta que tenga bien claro como puedo yo ayudar a nuestra amada tierra, Transilvania, razón por la que estamos todos aquí y no hemos sido consumidos por el tiempo.

Mi emplazamiento de retiro no es importante, he de deciros que ni yo la sé, pero mi Sire se encargará de que esté lo suficientemente aislado para no ser influenciado por el exterior ni sufrir peligro, él mismo ha lo ha hecho infinidad de veces.

Siento gran pesar por dejaros pero se que cuando regrese será para mejor y al menos tendré las ideas más claras con respecto al futuro.

También siento tristeza por dejar Thiuta y a sus gentes por las que ya siento algo mas que aprecio. Nosotros la fundamos con gran sudor y ahora crece con el sudor de sus honrosos habitantes. Esta tierra la dejo a cargo de mi amada chiquilla “Toreador” Yurina, ha aprendido muy rápido a usar su condición, y a pesar de su juventud sabrá reinar como la he enseñado y se que tendréis un trato más que cordial con ella.

Sabe que puede confiar en todos vosotros y la tenéis a vuestra disposición aunque confío plenamente en sus bondadosas decisiones.

En cuanto a nuestro pacto de crear descendencia estaré de acuerdo con lo que hagáis y podéis emplear la vitae que posee Zaius para crear a los dos chiquillos pensados, no mas por favor, sabéis mi opinión sobre la creación de descendientes, beberían merecerlo tras su plenitud de vida o estar al borde de la muerte y merecer vivir.

Espero nos veamos pronto y no me guardéis rencor por esto.


Abraxas, Príncipe de Tihuta

Pd: Te quiero Zaius hijo mío.