Balgrad, año 1218 d.C.
Querido Chiquillo,
Te escribo esta
carta para que entiendas la verdadera posición que estas ganando dentro de la ciudad de Kronstadt.
Ahora mismo
representas la figura de príncipe en la ciudad de cara al exterior, ya que Carlos el Tremere,
chiquillo de Zaius, no controla la superficie, y el Gangrel, Carlomagno, se
encuentra recluido en los bajos
fondos. Todo parece bastante optimo para ti, pero es más oscuro de lo que parece.
Piensa en la
situación desde nuestro punto de vista... Zaius no pretende gobernar pero sí ajusticiar. El es el máximo señor de la
ciudad y deberás respetarlo, por
él y por mí.
Lo que debería
preocuparte es el triunvirato que se presenta. Lo primero que voy a decirte es sobre Zaius, harías bien en no comentárselo a
él. Aunque el pretenda lo
contrario, el líder de la ciudad es y será su chiquillo. Eso no puedes cambiarlo, es la ley de la sangre. Aparentemente le
da poco poder, pero es justo lo
contrario. Tú te encargas de lo administrativo, pero ellos gobiernan. Eso me temo que no puedes ni debes cambiarlo.
Pero aceptando tu posición debes
anular al Gangrel. Creo que ante él lo tienes fácil. De hecho creo que no tienes que mover un dedo. El solo buscara su
ruina. Antes o después cometerá un
error, y Zaius lo ajusticiará, o incluso su propio Sire puede que no se encuentre cómodo con él, pero de eso ya me encargaré
yo... En tu caso, creo que no deberías
hacer nada, porque, si te encargas de tenderle una trampa, el simple hecho de que Zaius sepa que tu y el Gangrel habéis
tenido un problema, es suficiente para
que os castigue por igual.
Aprende de mis
palabras, no hagas que Zaius te relacione con la palabra "problema", y deja al Gangrel ahogarse en su
propia furia.
Somos por
derecho los gobernantes de esta tierra, porque los demás no entienden el poder
en toda su inmensidad...
Que la
oscuridad te abrace.
Adevarul, Príncipe
Lasombra de Balgrad
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| Ludovic, Regente de Kronstadt, chiquillo de Adevarul |
Respuesta de Ludovic
Kronstadt, 1218 d.C.
Querido Sire,
Entiendo mi verdadera posición en la ciudad de Kronstadt y
sé lo que represento exactamente, Zaius se ha encargado de explicármelo sin
lugar alguno a la duda.
Respeto a Zaius, Sire, y sin duda lo hago por vos. No me
preocupa en absoluto el Triumviratum, creo que es el principio de algo grande.
Creo que es muy buena idea poner las cosas claras sobre
las posiciones de sangre de Carlos, el chiquillo de Zaius. Si vos decís que
quiere que reine su chiquillo así será sin duda, pero ¿quiere su chiquillo
reinar?
En cuanto a Carlomagno, no tengo ninguna duda señor, se cómo
tratar a esa gente para que sea aliado y no enemigo y creo que sé hacerlo mucho
mejor que Zaius, no creo que debamos hablar de anulación, si me lo permites
Sire, aun que si es lo que queréis solo tenéis que decirlo.
Aprendo de vuestras palabras y me guían en la eterna
oscuridad, no he tenido el momento para agradecerle lo que me dio, creo que
haciendo que se sienta orgulloso de mi lo haré, no antes.
Sé que no soy un problema para Zaius y el tampoco lo es
para mi
Soy el gobernante de estas tierras por que vos lo habéis
querido señor y creo que crearemos algo grande entre las sombras señor.
Que la oscuridad te abrace, querido Sire
Ludovic, Regente de Kronstadt