Adevarul, Príncipe Lasombra de Balgrad |
Balgrad, año 1216 d.C.
Querido Señor del Valle,
señor Voivoda,
Quería expresarle mi
gratitud por haber permitido nuestra presencia en sus tierras y habernos
recibido como sus vasallos.
De nuevo expresarle mi
desolación por el acto imperdonable de mi compañero. He de insistir sin
embargo, y para disipar toda posible duda, en que creo que su excelencia actuó
con todo el derecho que su tierra le ha dado, y que mi sumisión a su poder es
absoluta. Creo en el poder de los fuertes y válidos, y queda claro para mí que
mi compañero no fue solo débil, sino torpe y descuidado.
Desde aquí refuerzo mis
palabras de alianza y le invito a que disfrute cuando quiera de la hospitalidad
de mi casa, que evidentemente, le pertenece...
Esta época está
resultando un tanto convulsa tanto para antiguos como para jóvenes
chiquillos que intentan buscar su lugar en este oscuro paraíso. No es ajeno a mí
las disputas que existen dentro de su clan y como a veces llegan a convertirse
en conflictos abiertos. No pretendo resultar grosero, pero no quiero pisar
barro sin darme cuenta. Me gustaría conocer mi posición, que en
este momento es la defensa de Balgrad, con lo que irrevocablemente es la
defensa de su Voivodato.
Esto dicho, actualmente
me encuentro en conversaciones con el señor Radu de Bistritz y con Mika Vykos,
y no querría encontrarme con que, tal vez por inexperiencia, estaría
dificultando su labor al ayudarles a ellos. Si encuentra tales contactos como
inapropiados, hágamelo saber.
Sin otro interés, quiera
recibir mis más profunda reverencia. Saludo así mismo a su hueste que tan bien
me recibió.
Adevarul, Príncipe Lasombra de Balgrad
Respuesta
de Vratislah a Adevarul
Viovoda Vratislah |
Príncipe
de mi Balgrad:
No
soy dicho en las artes de la tinta y el papel, lo mío es más bien la sangre y
la carne.
Estoy
complacido con su sumisa actitud, espero que su alma sienta lo mismo que dicen
sus palabras, vasallo mío, por su bien lo espero.
En
cuanto a la osadía de ese príncipe perro señor de pescadores, como decís, fue
debidamente castigada pero aun hay noches que pienso ¿por qué lo deje ir?, supongo
que aun no lo necesito. En cuanto requiera de sus servicios luchará por mí
hasta la muerte si se lo pido, en cualquier campo de batalla contra las odiosas
gárgolas de los usurpadores. Y espero que vos no os interpongáis, si no queréis
sufrir el mismo destino, será sin duda la prueba de fuego que demostrará si
vuestra alianza es verdadera o una mera armadura que os ponéis en mi presencia.
Declino
su invitación, no me gusta viajar y me necesitan más en mi tierra.
Claramente
es una época incierta para algunos chiquillos descarriados, pero no sois quien
para opinar de los entramados de los verdaderos dueños de la tierra que os
rodea. Cuando estos asuntos conciernan a Balgrad hablaremos de ellos, de
momento son asuntos solo de nuestro clan, los Tzimisce.
Su
posición en cuanto a Balgrad, es meramente administrativa y política, no se
inmiscuya en asuntos que no debe y vivirá más.
Espero
que no continúes esos tratos con los mayores traidores al clan que ha parido
demonio. No tengo nada en tu contra pero posicionándote a su lado extraías
claramente en mi contra. El Conde Radu un cerdo desleal que ha vendido su
patria y sus ideales por entrar en la política cainita occidental, merece ser
despellejado poco a poco durante un milenio tras el cual arder hasta la muerte
y finalizar vagando sin mente en el más allá, junto a los lémures del averno. Y
Mika Vikos, un usurpador con atuendo de monje que renegó de su patria y de su
sangre. Pactaría con el mismísimo Tremere, si no lo ha hecho ya, si ello le
otorgara poder terrenal. Y ahora reclama tierras en nombre del Dracon,
mentiroso y bastardo hijo de un buitre carroñero eso es lo que es y tendrá su
merecido, ya lo creo que lo tendrá, cuando las estrellas estén en su posición
correcta pagará con creces toda esa traición acumulada.
No
metas más las narices en nuestro guiso, ya hay suficientes cocineros
estropeándolo.
Su Dueño y Señor: Voivoda Vratislah